Un gravísimo caso de corrupción a gran escala que puede quedar en un mero reproche moral gracias a una estrategia de defensa perfectamente definida.
Llevamos semanas siendo espectadores del devenir del sangrante Caso Pujol, asistiendo impotentes a un nuevo caso de corrupción a gran escala que quedará en un mero reproche moral.
Es por todos conocido que la Juez del Juzgado de Instrucción 31 de Barcelona, que ha incoado diligencias previas a partir de una querella presentada por Manos Limpias, y el Juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz han librado varias comisiones rogatorias a Andorra para solicitar información de las cuentas abiertas a nombre de la Familia Pujol Ferrusola.
Pero no nos engañemos, no va a ser tan fácil ni el enemigo es débil. El Clan Pujol Ferrusola sigue una estrategia jurídica perfectamente diseñada y apelarán llegado el momento a la teoría jurídica del “fruto del árbol envenenado” para invalidar todos los datos que puedan incriminarles al haber sido obtenidos siguiendo “procedimientos ilegales” vulneradores del sacrosanto secreto bancario, aparte de presentar una cuanto menos sorprendente querella contra los bancos andorranos Andbank y Banca Privada Andorrana como responsables civiles subsidiarios, solicitando una indemnización por daños y perjuicios al haber permitido la filtración de información sobre sus posiciones bancarias en ese país, previa identificación del responsable.
El Clan Pujol Ferrusola sigue una estrategia jurídica perfectamente diseñada y apelarán llegado el momento a la teoría jurídica del “fruto del árbol envenenado”
Varios son los delitos que se le pueden imputar a Jordi Pujol y a su esposa, posiblemente cómplice y encubridora (y también a varios de sus hijos por complicidad y cooperación necesaria): malversación de caudales públicos, cohecho, tráfico de influencias, delito fiscal, blanqueo de capitales y prevaricación, entre otros, pero recopilar pruebas de cargo que no sean posteriormente declarados nulos se antoja muy complicado, aparte de que en muchos de los casos nos encontraremos con delitos ya prescritos o que, como mucho, se penarán con una simple multa.
La estrategia de defensa del Clan podría tener tres pilares fundamentales:
1. Presentar declaraciones complementarias para reducir el fraude fiscal a los menos ejercicios posibles.
2. Prescripciones.
3. La investigación del patrimonio no compete a la Agencia Tributaria española, sino a la Agencia Tributaria Catalana, con lo que ello significa.
4. Es difícil demostrar si es ilegal el origen de la ingente fortuna ingresada en metálico en distintos paraísos fiscales. En nuestra opinión, este punto es básico para la defensa del caso.
Totalmente de acuerdo contigo Antonia.
Un saludo
Buenos días.
Tal y como comentas, parece evidente que la estrategia de Pujol va dirigida a invalidar las pruebas que puedan provenir de las entidades bancarias andorranas.
Ahora bien, no descartaría que, finalmente, prosperen las imputaciones. No parece que las pruebas que puedan provenir de la banca sean las únicas de las que disponga el juez.
Me refiero, concretamente, a los informes de la policía sobre el presunto cobro de comisiones y las operaciones de ingeniería económica para llevarlos a término; pero, muy especialmente, a las declaraciones de terceros.
No sería de extrañar que las declaraciones de la ex novia de su hijo- quien afirma haber sido testigo de hechos y conversaciones presuntamente delictivas; se vieran ampliadas por la de aquéllos que puedan ser imputados en la causa en un futuro (empresarios, funcionarios y políticos de inferior rango) y que opten por llegar a un acuerdo con fiscalía, tal y como ha sucedido recientemente en varios casos de corrupción instruidos en Baleares (en que la omertá ha sido sustituida por carreras entre los imputados para confesar y obtener beneficios procesales).
Veremos si en este caso sucede lo mismo.