El fin de la Oratoria es hablar bien en público, y el abogado/graduado social, en cualquiera de sus funciones, ya sea en reuniones de trabajo, exponiendo sus conclusiones a un cliente, realizando un dictamen, un asesoramiento laboral o defendiendo sus intereses ante los Tribunales, tiene que informar, convencer y persuadir. Aquí os explicamos cómo conseguirlo.
1. Imagen personal
La imagen que vamos a dar a nuestros oyentes es básica. Debemos ir vestidos correctamente, con un aspecto agradable y cuidado.
2. Expresividad
Debemos ser expresivos, a veces incluso vehementes; gesticulemos, generemos sensaciones positivas en nuestro público.
3. Seguridad
Mostremos seguridad con nuestra voz (y también con nuestros gestos no verbales).
4. Improvisación con una buena preparación
El Orador Jurídico es aquel que maneja un Discurso Improvisado previamente esquematizado y sustentado en una profunda preparación y conocimiento del caso, en lo fáctico y en lo jurídico.
5. Planificación
Para planificar nuestra disertación, debemos tener en cuenta los siguientes aspectos:Búsqueda de información: Ley- Doctrina y JurisprudenciaOrdenar ideas e información.
6. Estructuración de la información
Estructurar y planificar esa información. Esquematizarla y desarrollarla mentalmente para fomentar la improvisación controlada que hemos de transmitir en estrados.
- Ayuda, una vez esbozadas las ideas básicas que vamos a transmitir, leer en voz alta nuestro escrito, ampliándolo con los puntos que conocemos y controlamos, pero no vamos a memorizar; de este modo, modularemos la voz y seremos conscientes del énfasis y de las pausas que tendremos que realizar durante nuestra exposición.
- No memorizar preguntas ni conclusiones. Conocimiento exhaustivo no es igual a memorizar, de ahí el desarrollo de un Discurso Improvisado.
- Estructuremos coherentemente nuestras alegaciones: exposición, argumentación y conclusión.
- Cuando valoremos documentos, remitámonos al número del mismo. Ayudaremos al Juzgador y a nosotros mismos.
7. Modulación de la voz
Modulemos la voz para generar sensaciones en el auditorio.
8. No se puede leer.
Genera una impresión nefasta e impide que generemos emociones en el interlocutor y modulemos el tono.
9. Evitemos la monotonía en la voz.
Si queremos enfatizar algo concreto, elevemos ligeramente el tono, de este modo lograremos que el Juez preste atención a nuestro discurso.
10. Enfaticemos palabras clave para nuestra defensa.
No olvidemos vocalizar correctamente.
Desde el Instituto de Práctica Procesal, realizamos talleres de Simulación de Juicios intensivos, presenciales y a través de videollamada grupal, donde os enseñamos de forma práctica y amena a actuar en Sala. Podéis ver toda la información desde Aquí
muy interesante su aporte al Derecho. gracias
Muchas gracias Eduan. Un cordial saludo
Me alegro mucho de esta iniciativa, tan necesaria, para nuevos operadores jurídicos, ya que nuestro futuro (y el de los intereses de nuestros clientes) va a depender de que podamos hacer un buen papel en Sala.
Muchas gracias por tu comentario, Susana. Un fuerte abrazo
GRACIAS, EXCELENTE CONTRIBUCION
MUCHAS GRACIAS DOCTORA MUY IMPORTANTE SU INFORMACION , PARA COMPARTIRLO Y DAR A SABER LA IMPORTANCIA DE LA ORATORIA JURIDICA
Gracias a ti por seguirnos,
Saludos!
Saludos y gracias por apoyar al discurso Técnicojuridico